Sábado, 29/04/2023:
Aldán (Pontevedra): Curiosidades
Aldán es un pueblecito al que me gusta volver por mucho que lo tenga visto y revisto. Así que, cuando Pili me informó de esta visita guiada por los miembros de la organización de A illa dos Ratos, no lo dudé ni un instante.
Esta pequeña villa marinera se sitúa al noroeste del municipio de Cangas do Morrazo. Al norte limita con las parroquias de Beluso y Bueu; al este, con la parroquia de Darbo; al sur, con la parroquia de Hío, y al oeste, con la ría de Aldán. Salvo por esta parte marítima, el resto de la parroquia está rodeada por pequeñas formaciones montañosas, entre las que destaca la Sierra de la Magdalena.
Cuenta con un río principal, el río Orxás, que desemboca en el fondo de la ría, en la playa de San Cibrán, utilizada en parte para el cultivo de berberechos.
El punto de encuentro para iniciar la ruta era el puerto, junto a las instalaciones deportivas. Aldán conserva su antiguo burgo marinero y sigue viviendo, fundamentalmente, de la pesca, aunque el turismo ha ido ganando terreno en los últimos años. Y no podemos olvidar los éxitos cosechados a nivel deportivo por el club de piragüismo Club de Mar Ría de Aldán, del que han salido campeones olímpicos y del mundo, como David Cal (con 5 medallas), Teresa Portela y Rodrigo Germade (ambos plata en Tokio 2020) y Carlos Pérez Rial (oro en Pekín 2008).
Destacamos los monumentos del puerto dedicados al deporte: uno, en honor de todos los piragüistas, y otro, en honor a todos los medallistas olímpicos. En la parte posterior de esta escultura que aparece en la fotografía inferior, dedicada a Teresa Portela y a todos los piragüistas de la zona, se puede leer una frase que dice "Traballa duro, pero en silencio. Deixa que o éxito se encargue de facer todo o ruido". Esta piragüista, a sus 39 años, consiguió su primera medalla olímpica en Tokio, una plata. A pocos metros, se levanta el otro monumento: los aros olímpicos, en los que figuran los nombres de todos los piragüistas que han competido en los Juegos.
En el mismo puerto, los guías nos explicaron que, hasta los años 70 predominaba la pesca de bajura, pero, a partir de entonces, empezó a desarrollarse la pesca de altura, punto fuerte hoy día de la economía de Aldán. Una parte importante de la flota de Vigo tiene armadores de Aldán y hay marineros de esta villa en barcos pesqueros por medio mundo. También es importante la industria mejillonera, que incluye el cultivo en bateas y la depuración de estos preciados moluscos. Y tenemos que señalar, además, que, a principios de siglo, se realizaba aquí el enlatado en conservas, en una conservera situada en la playa de Menduiña y, posteriormente, en la que funcionó en el puerto hasta los años 80. Esta última es hoy en día una bonita casa rural, la llamada Casa de Aldán, tal y como se ve en la fotografía inferior.
Desde el puerto fuimos caminando por el paseo marítimo, una pasarela de madera que se extiende al lado del mar. Una maravilla disfrutar del olor a algas y a sal marina y ver las barquitas ondeando en las tranquilas aguas de la ría.
Al inicio del paseo, nos encontramos con la figura de la Virgen del Carmen, patrona de los marineros. Y junto a ella, un tradicional crucero. Las fiestas del Carmen se celebran en Aldán la última semana de julio, con diversos actos culturales y verbenas con orquestas en la explanada del puerto. También se celebra una procesión desde la Iglesia, que termina en esa misma explanada con una misa de campaña. A su finalización, la procesión pasa a ser marítima, en la que participa la mayor parte de la flota de barcos que se encuentra en el muelle. Al llegar al punto de la ría sobre la altura de Bon, se tira una corona de flores y los barcos dan media vuelta.
Más adelante, vemos el busto de José Graña Montes. Este párroco, consciente de la pobreza de las familias de la zona y de la existencia de numerosos niños huérfanos, dedicó sus esfuerzos a procurarles un techo y una educación (quizá eso explique la cantidad de vocaciones eclesiásticas que se han dado en esta pequeña comarca). Él, junto con su hermana Josefa, iniciaron lo que hoy es el Colegio Sagrada Familia de Aldán.
Nos adentramos en el interior del pueblo y llegamos a la Iglesia de San Cibrán. Es un edificio neoclásico (1866) que se alza en el mismo lugar que ocupó un templo anterior del siglo XVI. Su fachada aparece presidida por la imagen del patrón de la parroquia, San Cibrán, con las vestiduras y los atributos de obispo, situada en una hornacina y bajo un reloj. Destaca también la gran torre, en dos cuerpos con balaustradas, que alberga el campanil y que se dice fue copiada de la ex-colegiata de Cangas después de que una primera hubiese caído como consecuencia de un temporal. Como curiosidad, decir también que, en el proceso de construcción, las paredes de la iglesia se cayeron un par de veces.
Dimos una vuelta alrededor del edificio y nos llamó la atención una puerta lateral tapiada. ¿La utilizaba el señor de Aldán para entrar directamente a la capilla o era usada para encuentros con jóvenes doncellas vírgenes, como cuenta la tradición? jejejejejeje...
Del otro lado, nos detuvimos frente a otro busto y a un gran mausoleo decimonónico. El busto representa al Obispo de Tui-Vigo, José Cerviño Cerviño, nacido en Aldán, que ejerció su cargo en la diócesis desde 1976 a 1996. Fue erigido como homenaje a su persona mientras este estaba aún con vida, en 2009, ya que falleció en 2012. En ese lugar se hallaba el antiguo cementerio. Quizá por esa razón se encuentra aquí el Mausoleo, aunque parece que originalmente estaba situado en otro lugar, aunque no lejano. Dicen que su autor podría ser el mismo maestro al que se atribuye el Cruceiro de O Hío. Fue construido en 1879, según consta en la inscripción, hoy bastante deteriorada por el paso del tiempo. Ahí mismo, también, se alza la muralla que bordea el pazo de los señores de Aldán.
Es una danza muy curiosa, monótona y lenta, en la que los hombres visten traje y zapatos negros con sombrero a juego de fieltro. Las mujeres van con traje blanco, delantal negro con pedrería, mantón de Manila sobre los hombros y collares también de pedrería de diferentes tamaños, además de llevar unos sombreros de paja adornados con una composición artificial floral de diversos tonos que cae por su parte trasera en numerosas y largas cintas de colores que llegan hasta el suelo.
Los danzarines esperan a la salida del santo y, cuando este sale, le hacen la reverencia y van danzando a la cabeza de la comitiva sin darle en ningún momento la espalda. Finalizado el recorrido y antes de que vuelva a entrar en la iglesia, repiten la danza en su honra. En algún momento este baile se realizó en los jardines del pazo de los señores de Aldán, pero cuando la condesa afirmó que se danzaba allí para rendirle pleitesía a ella, los danzantes trasladaron el evento al atrio de la iglesia.
Muy cerca de la iglesia y junto a las murallas que bordean la torre de los señores de Aldán, al lado de los restos de un antiguo palomar, se alza un pequeño montículo de piedras graníticas en cuya cima se encuentra un curioso sarcófago antropoide o tumba pétrea, conocido como la Cama do Demo, Cama do Xudeu o Sartego da Laxe. Posiblemente date de épocas alto-medievales. Por el rebaje de las rocas es posible que aquí existiese una antigua construcción, quizá la primitiva torre de los señores de Aldán, levantada con funciones meramente defensivas. También se aprecia algún agujero de forma cuadrada, posiblemente para la colocación de alguna cruz con la intención de sacralizar el lugar.
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Vista de la Iglesia desde el montículo en el que está el sarcófago, junto al palomar |
El sarcófago tiene unas dimensiones de 180 x 52 cm y está labrado sobre el mismo granito. Hasta los años 1960 conservó su tapa, pero parece ser que una vecina del lugar la robó para hacer un banco en su jardín. Los propios Condes de Aldán hablaban de esta tumba como la del antiguo fundador de su linaje, que podría haber sido un normando venido del norte.
La leyenda cuenta que el demonio iba todos los sábados en busca de una rapaza de la parroquia de San Cibrán para yacer con ella en el sarcófago y así tener nuevos hijos. ¿El demonio o el conde? ¿O el párroco?
En este mismo punto, los guías nos explicaron que los palomares eran importantes en la antigüedad por tres motivos: para criar palomas mensajeras, para conseguir los preciados pichones que formaban parte de la mesa de los nobles y para obtener sus "cacas" a fin de abonar los campos.
Y también aquí nos dieron las explicaciones correspondientes al escudo de la casa de Aldán: cinco flores de Lis. El escudo original no era este, sino que contenía dos lobos. Parece ser que, en el siglo XI, un capitán general que vivió en tiempos de Fernando II de León, D. Hernán Pérez de Aldán, que padecía una grave enfermedad, decidió acudir al Monasterio de Monserrat en busca de una milagrosa curación. Postrado en una camilla, intentaba abrirse paso para llegar a la "moreneta". Entonces, un joven se subió a ella para poder ver por encima de las cabezas de aquella multitud. El capitán, muy ofendido, increpó al joven e inició una disputa que acabó con una cita para un duelo a muerte. El joven se identificó como el Duque de Normandía, sobrino del rey Felipe I de Francia, y el capitán, por su estado de salud, decidió aplazar el duelo hasta que mejorase y pidiese permiso a su propio rey. Cuando hubo mejorado y recibido el beneplácito para enfrentarse en duelo con el sobrino del rey francés, fue a Francia y venció en la lid. Dispuesto ya a matar al joven, el rey de Francia le pidió que no lo hiciera y que, a cambio, le daría lo que él quisiera. El capitán, además de tierras y fortuna, le pidió 5 flores de Lis de las 8 que ostentaba la Casa Real de Valois. El monarca, para evitar la muerte de su sobrino, accedió a la petición, pero pronunció la siguiente frase:
"Je te les donne, bien qu'elles soyent maldonnées"
Dice la leyenda que, desde ese mismo momento, los de Aldán cambiaron su apellido por el de Maldonado, en recuerdo de ese glorioso día para la familia. Así pues, esta es la explicación de por qué el escudo de los Borbones solo tiene 3 flores de Lis de las 8 iniciales.
Resulta curioso que esta leyenda, que explica la presencia de las 5 flores de Lis en el escudo de la Torre de los señores de Aldán, también se encuentre en tierras cacereñas. Y eso porque se cuenta que parte de la familia emigró y se asentó en Cáceres a finales del siglo XIV.
Dejamos la cercanía de la Torre de Aldán y cruzamos la carretera para adentrarnos en la conocida Finca de Frendoal, más popularmente llamada El Bosque Encantado. Todo el mundo dice que hoy en día es propiedad del concello de Cangas. Sin embargo, para mi sorpresa, parece ser que no es así, sino que pertenece a una empresa privada que está en pleno litigio con el ayuntamiento. La idea era construir aquí una serie de viviendas de lujo (urbanización que se iba a llamar El Bosque Encantado, de ahí el nombre actual, que nada tiene que ver con la belleza del paisaje), pero la oposición vecinal lo impidió. La empresa reclama ahora al consistorio los millones que pagó inicialmente por esta operación, pero la cosa está aún lejos de estar resuelta.
La finca era parte de la Torre de Aldán, perteneciente a los Condes de Canalejas, y era utilizada para actividades de ocio y de recreo, como la caza o la práctica del críquet. Con la construcción de la carretera PO-315, quedó dividida en dos: a un lado quedó el pazo, actualmente en manos de un familiar de los condes, y al otro, el bosque, teóricamente donado al concello de Cangas, que, paradójicamente, no llegó a inscribirlo como suyo.
Después de pasar un puente medieval y un antiguo lavadero, un camino nos introduce en el bosque en el que no hay ningún tipo de señalización. Llama la atención lo tupido de la vegetación, formada en gran parte por eucaliptos, pero también por robles, abedules y castaños, así como por una famosa planta invasora conocida como Amor de Hombre. Uno de los eucaliptos tiene un tronco enorme, se necesitan 8 personas con los brazos abiertos, para abarcarlo en su totalidad.
A pocos metros de la entrada se alza un pequeño torreón que pertenece a lo que iba a ser un castillo. En realidad, solo posee la fachada y alguna dependencia vacía que se encuentran por debajo del desnivel de tierra que hay en su parte trasera. En su momento parece que contaba con un pequeño foso que se salvaba a través de un puente levadizo. Fue construido en los años 60 y nunca se llegó a terminar. Hay quien dice que estaba destinado a ser una biblioteca... ¿acaso el entorno no es el ideal para sentarse a leer solo acompañado por el canto de los pájaros en los árboles? En cualquier caso, los condes utilizaban la explanada delantera para jugar al críquet.
El río Orxás atraviesa este paraje. De hecho, siguiendo el curso río arriba, hay tres molinos de agua que en su día tuvieron mucha actividad y que hoy se encuentran en ruinas y en proceso de rehabilitación.
Un poco más adelante nos encontramos con un viejo acueducto de mampostería, conocido como Arco dos Mouros o Arco da Condesa.
La construcción del acueducto data de finales del siglo XVII o principios del siglo XVIII. Posiblemente, su origen esté relacionado con la existencia de una salazón que había en la Torre de Aldán, a la que se enviaba agua procedente del río. Con posterioridad, fue utilizado por los Condes de Canalejas para el regadío de sus cultivos.
En el vídeo que sigue a continuación se aprecia la belleza del entorno.
Terminamos la ruta junto al Pazo de Vista Alegre, hoy abandonado.
Muy agradecidas a los guías de A Illa dos Ratos por hacer la visita tan amena e interesante.
Extra: Comida en Bueu y playa de Areacova
Teníamos reservada una mesa en el Restaurante La Zarzamora. Es un lugar pequeñito con apariencia de simple bar, pero con una cocina extraordinaria: chipirones con alioli, cazuela de pulpo con queso provolone y un solomillo de ternera sobre risotto de champiñones, más tarta de la abuela, mousse de chocolate y tarta de pistacho.
Buscando un lugar junto al mar para tomar un cafecito, llegamos a la Playa de Areacova.
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